"EL GRITO DEL PUEBLO DESPIERTA EN HONDURAS"
Hace tiempo…mucho tiempo que nuestra región centroamericana viene sufriendo de dolores insoportables. Hay dolores en Guatemala, en El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. De todos los dolores parece que la violencia atraviesa a todas nuestras queridas naciones. Violencia que se traduce no solo en el grito de las armas, o la velocidad de los machetes, o los puños cerrados que se estrellan en los rostros humanos, o los zapatos (o botas) que pisotean a las personas; no solo eso, la violencia se traduce también en palabras ofensivas, comportamientos fríos de gente que se sienta a ver lo que pasa, actitudes cerradas en la concepción del mundo.
Hoy más que nunca, sin obviar lo demás (el hambre en Guatemala, la violencia y las extorsiones en El Salvador, la inseguridad en Nicaragua, Costa Rica y Panamá) nos duele Honduras.
Quiero hacer un llamamiento serio a todos mis hermanos dominicos y a todas las personas solidarias con la causa de la justicia y la paz, a mostrarnos disponibles ante los embates que vive la gente en la hermana República de Honduras. Pido que incluyamos en nuestras oraciones a todo el pueblo hondureño, en especial a nuestros hermanos frailes, religiosas y laicos presentes en esa situación convulsionada.
A los frailes en San Pedro Sula, manifiesto mi cercanía y mi solidaridad en este y en todo momento. Adelante como dominicos al lado del pueblo.
Desde la comunidad de Santa María Cahabón, en Guatemala estas breves líneas cargadas de solidaridad.
Fr. Carlos Flores, OP – Promotor de Justicia y Paz (Centroamérica)