CARTA DE LA COMISIÓN DE JUSTICIA Y PAZ DEL BRASIL La Familia Dominicana del Brasil celebró su 20 encuentro nacional de Justicia y Paz desde el 31 de octubre al 2 de noviembre, con más de 80 participantes. Al agradecer al Dios de la vida por este tiempo de caminada, reconocimos la importancia de agradecer también a los hombres y mujeres que se colocan al servicios de Dios en la lucha por la defensa de la vida y de los Derechos Humanos en nuestro tiempo.
Goiania, 02 de noviembre de 2009
Brille así su luz delante de los seres humanos, para que vean sus buenas obras y
glorifiquen al Padre que está en los cielos . (Mt 5,16).
Apreciados hermanos/as de la
Familia Dominicana de Honduras,
Deseamos que se encontren todos/as con salud y paz.
La Familia Dominicana del Brasil celebró su 20 vo encuentro nacional de Justicia y Paz desde el 31 de octubre al 02 de noviembre, con más de 80 participantes.
Al agradecer al Dios de la vida por este tiempo de caminada, reconocimos la importancia de agradecer también a los hombres y mujeres que se colocan al servicio de Dios en la lucha por la defensa de la vida y de los Derechos Humanos en nuestro tiempo.
Nos gustaría manifestarles nuestra gratitud a ustedes, Familia Dominicana Hondureña por la postura asumida delante de las amenazas a la soberanía de su pueblo. Su testimonio profético está sirviendo de alimento espiritual para nosotros/as que creemos en la construcción del Reino a partir de los/as pobres, pues su postura nos rescata de la comodidad y muestra las señales de esperanza que nacen del pueblo.
Sabemos que desde el inicio de la resistencia de las elites al movimiento popular que exigía el retorno del presidente elegido, Manuel Zelaya, al gobierno, ustedes fueron capaces de analizar y evaluar lo que estaba sucediendo de forma lúcida y con coraje, asumiendo una posición delante de los acontecimientos que les costó la incomprensión, incluso, de parte de algunas instancias de nuestra propia Familia Dominicana.
Bendecimos y agradecemos a Dios por la postura de ustedes. Ella fue luz, fuerza y solidaridad para los movimientos sociales de Honduras y advertencia para los poderosos. Al promover el golpe, las elites apostaban por la pasividad del pueblo, y gracias al trabajo y testimonio de hombres y mujeres como ustedes la fuerza popular no quedó adormecida y la participación popular resistió a la furia de la dominación elitista.
En este momento en que la opinión mundial tiene el caso como encerrado, reconocemos que todavía existen varios desafíos a ser superados, porque no se trata solamente de simple convención social, sino de la implementación de un proyecto de nación.
Por eso, presentamos nuestra solidaridad y rogamos a Dios que el mundo contemple sus buenas obras y se comprometa cada vez más con el Dios de la Justicia y de la Paz.
Fraternalmente,
Comisión Dominicana de Justicia y Paz del Brasil.