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ECOS DE LA SEXTA ASAMBLEA GENERAL DE LAS HERMANAS DOMINICAS INTERNACIONALES (DSI)
Las Prioras Generales de la Congregaciones de hermanas dominicas nucledas en el DSI (Hermanas Dominicas Internacionales) se reunieron del 14 al 19 de mayo en Roma, donde observaron con realismo la vida religiosa en la actualidad y prepararon el futuro para el bien de la predicación.
Conforme lo señala la crónica elaborada por el Secretariado del DSI, “parece nacer el deseo de superar el ansia por el número de religiosas que decrece, dejando su lugar a la voluntad de alimentar la vida comunitaria, de dar sentido a la vida religiosa.
Como bien afirma Fray Felicísimo Martínez, OP: ‘algunos hechos ponen de manifiesto que el nivel de calidad de vida o de satisfacción personal es bajo en algunos miembros de la vida religiosa. No estoy hablando a nivel moral, de mala gente, de personas infieles, de religiosos disolutos… hablo simplemente de la posibilidad de que la falta de sentido constituya la crisis más honda, la raíz más profunda de una tristeza incrustada en el alma’”.
La Hermana Viviana Ballarín OP, mediante la figura bíblica de la Samaritana y de la Hemorroísa, exhortó a las participantes a reencontrar la profundidad de su ser mujeres religiosas, con una identidad y una misión específica: "el futuro de la vida dominicana atraviesa el reconocimiento y la acogida realista de la pobreza del momento que se está viviendo, una pobreza que se deja encontrar como la samaritana en el pozo di Sicar[1] y se convierte en una audaz presencia de esperanza para aquellos que habitan en la ciudad.
Hoy es necesaria mucha pobreza para poder acoger el reto de la misión, de la interculturalidad y de la intercongregacionalidad, camino que se abre ante nosotras como una perspectiva de futuro. Tenemos tras de nosotras la experiencia estupenda de la esperanza audaz, experiencia que nos dice que sí es posible llevar a cabo este camino, experiencia que se cuenta con los hechos pero que es importante también contar en estos días."
NUEVA ESTRUCTURA ORGANIZATIVA
Ante la realidad de la vida religiosa, con el decreciente número de hermanas y el desafío de la sociedad globalizada emergió la exigencia y el deseo de interrogarse sobre la posibilidad de una nueva estructura organizativa en lugar de tantas Congregaciones y comunidades.
En este sentido, una priora lanzó una provocación con esta pregunta: “¿qué me dirían si un día nosotras, Hermanas Dominicas de vida apostólica, no estamos más divididas en 153 Congregaciones, sino que nos encontramos en una unidad con una estructura única de gobierno orientada a la Predicación? No será ya el DSI la semilla de una Congregación global de Mujeres Dominicas Apostólicas?”
DESAFÍOS COMUNES
La Asamblea, según la crónica, “ha sido un verdadero ‘encuentro’ de Familia, en un clima de apertura, sereno y dialogante. Esta atmósfera de intercambio sereno ha ayudado a las hermanas a abrirse y a sentirse menos solas, sobre todo a aquellas que se encuentran insertas en lugares maltratados por la guerra y la violencia.
La riqueza y la profundidad del debate han hecho sobresalir con claridad que, no obstante las diferencias lingüísticas y culturales, muchas Prioras viven y se encuentran ante desafíos comunes. En este caso verdaderamente la unidad ha hecho la fuerza”.
La presencia de cinco hermanas jóvenes (con menos de 40 años de edad), provenientes de los cinco continentes, propició el diálogo con su propia perspectiva, pidiendo mayor confianza y espacio de colaboración.
NUEVO EQUIPO DE COORDINACIÓN
La Asamblea designó el Consejo de Coordinación de DSI para los próximos tres años, reeligiendo a cuatro de las coordinadoras y acogiendo en el equipo a una nueva hermana para América del Norte. Se agradeció especialmente a la Hna. Patricia Simpson, quien terminó su mandato, por “el trabajo realizado en estos años con dedicación y constancia”.
El nuevo consejo de coordinación del DSI quedó integrado por: África, Hna. Michael Mdluli; América Latina y el Caribe, Hna. Irene Díaz; América del Norte, Hna. Rose Marie Riley; Asia – Pacífico, Hna. Cecille Espenilla; Europa, Hna. Sara Böhmer.
Al concluir la Asamblea, la Hna. Fabiola Velázquez Maya, coordinadora internacional, destacó que "la esperanza, sentimiento universal cada vez más anhelado, es tema bien antiguo de la literatura, de la teología, de la espiritualidad, de la Biblia…de las artes que cantan los poetas, que los artistas pintan, de la cual los escritores se inspiran y que los místicos y el pueblo de Dios salmodian… La esperanza es tema eterno, porque el ser humano no sólo vive de esperanza, en sí mismo es esperanza…"
[1] El Pozo de Siquem (Sicaraen arameo) en la actual aldea de Askar. N.T.
Información e imágenes aportadas por Patricia Morgante