MÁS AMENAZAS CONTRA EL OBISPO DOMINICO RAÚL VERA Nuevamente el Obispo dominico de la diócesis de Saltillo (México), Monseñor Raúl Vera, fue objeto de amenazas a causa de su firme postura en defensa de los derechos humanos y el cese de la violencia en México.
El jueves 14 de julio por la mañana aparecieron en el Atrio de la Catedral de Saltillo cuatro pancartas con mensajes en contra del Obispo. Inmediatamente fueron retiradas y resguardadas dentro de la iglesia. Una se localizó sobre el callejón Santos Rojo y otra más en el lado de la calle de Juárez.
De la única que se pudo conocer su contenido fue la colocada sobre el callejón, que decía: "Queremos un obispo católico". El jueves se informó que Mons. Vera estaba en la ciudad de México y que no había emitido ningún comentario al respecto, ni tampoco su vocera, María Eugenia Arriaga.
Durante los últimos años, Vera López ha hecho duros pronunciamientos condenando la violencia en México y a los grupos de la delincuencia organizada.
Concretamente, se ha referido al tema de las desapariciones y al secuestro de los migrantes.
Este 19 de julio el Pastor declaró que en Coahuila, las bandas del crimen organizado reclutan niños de 12 años para utilizarlos como "halcones" en sus actividades delictivas.
Por su parte, la Diócesis de Saltillo, a través del Vicario General, Gerardo Escareño, manifestó por medio de un comunicado que la defensa y promoción de los Derechos Humanos es y seguirá siendo una prioridad de Monseñor Raúl Vera en Coahuila y en México.
El Vicario General dijo que la actividad constante del Obispo con sus planes de trabajo y sus agentes de pastoral, no está al margen del Evangelio, ni de las normas y orientaciones de la Iglesia, ni de la sociedad.
"El abordar no sólo cuestiones de Iglesia, sino también las de la vida pública, fuente continua de contradicciones, no representa un desvío hacia terrenos ajenos a la misión pastoral", dijo el presbítero.
Agregó que aseguró que por fidelidad al ministerio pastoral que desempeña, Mons. Vera no cesará su dinamismo y su voz, "que buscan contribuir a la construcción de comunidades de fe más vivas y comprometidas, y de una sociedad más humana, aunque lo expongan a la agresión, tan fácil de perpetrar en estos días tan desafiantes en los que vivimos y en esta sociedad tan agitada, en la cual la Iglesia se encuentra inserta".
Por otra parte, el Centro Diocesano para los Derechos Humanos, Fray Juan de Larios, repudió la colocación de mantas en contra del obispo Raúl Vera López y calificó los hechos como actos de hostigamiento, provenientes de personas que desafortunadamente apuestan por la intolerancia y la violencia.
El Centro Diocesano expresó su preocupación de que grupos conservadores se oculten en el anonimato ante su incapacidad para proponer y entablar diálogos. (Información tomada de Cidalc)