Nos asomamos a la obra y al testimonio de Delia Acevedo, laica dominica de Cuartel Quinto, Moreno, Buenos Aires. Madre y abuela, amante de la vida, hace 20 años que comparte la misión con las hermanas dominicas de Nuestra Señora del Rosario y Santa Catalina de Siena. En esta cuarentena, que aprovechó para pintar mucho, continuó de modo telefónico con la tarea de contener a mujeres que sufren violencia. El arte, -nos cuenta – es sanador y liberador.
“El arte es una exposición sanadora y es liberación. Siempre me gustó, pero en una familia de ocho hijos y unos padres autoritarios nunca se nos escuchaba. Cuando fui mamá estaba en los cuadernos de mis hijos cuando tenían que hacer un dibujo. Después, con los años tuve un problema de salud y fui a estudiar pintura en un lugar comunitario del barrio, por eso digo que es sanador. Me invitaron a pintar unos murales barriales.
Mis compañeras saben que hace dos años que soy viuda y todo el tiempo me preguntan cómo estoy, ya que vivo sola, pero siempre me mandan mensajes, chistes, oraciones, me siento acompañada. Les contesto con un dibujo que estoy haciendo lo que me gusta y que, con la presencia de Dios que me contiene, todo se soporta.
Trabajamos con una compañera de la organización en la contención de Mujeres que sufren violencia y en cuarentena estamos haciendo la contención por teléfono. En cuarentena conocí a una chica de 17 años que, por consecuencia de ser abusada por su padre, tuvo intento de quitarse la vida. Como la hermana me comentó que le gustaba dibujar y ella veía mis estados (en las redes sociales) le envíe un dibujo, le gustó y lo dibujó. Mi alma se estremeció cuando me lo envió y me dijo que la mujer mariposa del dibujo es ella, que resurge de entre las cenizas. En ese momento pensé que Dios estaba entre nosotras porque es muy difícil cuando se presenta una situación así.
Creo que hace 20 años que soy laica dominica. El carisma aporta a mi vida el amor al prójimo, ser contemplativa, ser una herramienta de Dios y la más chiquita, pero ser útil en lo que él me necesita. En ese momento actúe con las herramientas que tenía cómo laica, el arte. En el año 2017 me invitaron las hermanas a participar de PredicArte en Paraguay donde fui con la hermana Vicky (Virginia Villaverde)
¿Qué le diría a alguien que quiere dibujar y no se anima? Si alguien quiere pintar sólo tiene que hacerlo, no importa cómo le salga, es bellísimo!!!!!”
Delia Acevedo