Cidalc al Día
Noticias
“EL PADRE PEPE: UN TESTIGO CREÍBLE".
Libro que retrata al fraile dominico que desde hace medio siglo entrega su vida por el pueblo cubano
El pasado 28 de mayo, el Aula “Fray Bartolomé de Las Casas” del Convento San Juan de Letrán, de los Frailes Dominicos en la Habana (Cuba), fue el escenario de la presentación del libro “El Padre Pepe: un testigo creíble”, del periodista Miguel Albuerne.
¿Quién es el Padre Pepe?. Se trata de un fraile dominico que desde hace más de 50 años viene entregando su vida al servicio del pueblo cubano que lo vio nacer; el mismo que en las duras circunstancias en que los frailes se vieron impelidos a abandonar Cuba, se quedó prácticamente solo, parapetado en la isla, custodiando fielmente el patrimonio de la Orden.
El libro fue presentado por el Obispo Auxiliar de La Habana, Mons. Juan de Dios, y el prólogo es del Vicario de los Dominicos en Cuba, Fray Manuel Uña op, quien asegura, sin titubeos, que el P. Pepe es un “don” para Cuba, para la Iglesia y para la Orden de Predicadores, un modelo a seguir por los dominicos que quieran entregar la vida para servir a su pueblo, al estilo de Domingo de Guzmán.
Compartimos los comentarios del libro y el retrato del P. Pepe delineados por la Hermana Evangelina Rodríguez, Dominica Misionera de la Sagrada Familia (Cuba).
“El libro no podía llevar un título más digno que éste: ‘El Padre Pepe: un testigo creíble'.
Quien presentó el libro, Monseñor Juan de Dios, Obispo Auxiliar de La Habana, sabe muy bien quién es el Padre Pepe, y lo hizo desde el cariño; y quién ha puesto prólogo a esta obra, Fr. Manuel Uña OP, Vicario de los Dominicos en Cuba, lo ha hecho igualmente desde el cariño y cercanía de hermano, y tampoco ignora quién es este hombre ‘recio' que pudo enfrentarse a lo que en Cuba se vivió unas décadas atrás y afrontar con ‘coraje' la situación.
El autor, Miguel Albuerne, periodista cualificado, ha sabido recoger la sabiduría y la experiencia del P. Pepe y los testimonios de personas cercanas a él.
SERÉIS MIS TESTIGOS….
Casi siempre se suelen tributar reconocimientos y alabanzas a una persona cuando ya no está entre nosotros, cuando ha partido de esta tierra y los reconocimientos no hacen ya falta.
El poeta León Felipe dirá: …'en vida, hermano, en vida..'. ‘.Es mejor escribir la historia con documentos vivientes'. Este es nuestro caso, la historia de un dominico, testigo de cuánto ha pasado por la piedras de San Juan de Letrán, de la iglesia del Sagrado Corazón, de la de Jesús Obrero y Santa Rosa de Lima: lugares que bien saben y pueden hablar del Padre Pepe. Su experiencia, el conocimiento de su ciudad y de la sociedad que integró en diferentes épocas, lo convierten en un testigo excepcional.
Es por tanto, razón de justicia, reconocer la trayectoria de este hermano, de quien se puede decir, con toda propiedad, que ha regalado su vida al servicio del pueblo cubano, el pueblo que lo vio nacer. ‘Soy sacerdote para servir a mi pueblo', expresaba en el recordatorio de sus Bodas de Oro sacerdotales, celebradas recientemente.
Fray Manuel, al prologar el libro, ha sabido recoger la entraña del Padre Pepe al decir que ha sido y es un ‘DON' para Cuba, para la Iglesia y para la Orden, un regalo para las generaciones que nos sucederán. El Vicario de los Dominicos en Cuba confía en que el P. Pepe marque el camino a seguir por los nuevos dominicos que quieran entregar la vida para servir a su pueblo, al estilo de Domingo de Guzmán.
Recordando el título del libro: ‘El P. Pepe, un testigo creíble', nos damos cuenta de que no es un título elegido al azar. Como manifiesta Fray. Manuel, es un título que recoge perfectamente cuánto lleva en sí el P. Pepe. Es un hombre de Dios e hijo fiel de Santo Domingo, hombre fiel a su pueblo cubano.
Cuando los frailes partieron de Cuba, obligados por las circunstancias, él se quedó solo en la isla con dos hermanos de avanzada edad. Fiel y en silencio, supo reclamar y cuidar el patrimonio de la Orden. Pasó momentos duros y difíciles, que pudo superar por su fortaleza y ‘coraje' al estilo de Domingo de Guzmán.
El Evangelio de la compasión lo ha predicado con su cercanía y capacidad de escucha. De ello dan fe las personas que se han acercado y se acercan a él.Así lo pudimos comprobar en el Aula 'Fray Bartolomé de las Casas' durante la presentación de su libro. Además de sentirse arropado por la familia dominica en Cuba, numeroso público aplaudió sus cálidas palabras de agradecimiento.
El Padre Pepe nunca ha tratado de imponer por la fuerza su convencimiento de que Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida.
Con su ministerio sacerdotal y su vida de hombre coherente, ha proclamado con sencillez y sin hacer ruido, la fe en la cual cree.
La vida es un tejido en el que se van entrecruzando dos hilos que podemos llamar el de los ‘diseños y el de los imprevistos'.Somos dueños de nuestra propia historia, no es ella la que nos conduce y posee. Nadie puede decidir desde fuera cómo va a ser nuestra vida, y es una equivocación compararse con otros; nadie puede vivir vidas ajenas, sólo podemos vivir la propia con los recursos y capacidades de que disponemos. En esta partida que es la vida, se trata de jugar del mejor modo posible con las cartas que Dios nos ha dado. Y el P. Pepe ha sabido jugar bien con sus cartas. ‘La experiencia no es lo que te ocurre; es lo que haces con lo que te ocurre', dice certeramente Aldous Huxley.
¡Gracias P. Pepe! por el testimonio de tu vida. La Familia Dominica en Cuba te lo agradece de verdad”.
Hermana Evangelina Rodríguez
Dominica Misionera de la Sagrada familia
La Habana, 4 de junio 2009