HERMANAS DOMINICAS DE LA PAZ “Fue arduo el trabajo de preparación para la nueva Congregación: elegir su nombre, manera de gobernar, elecciones de una Priora y su Consejo. El visto bueno de Roma y el Capítulo de 2009 llegaron en abril, cuando el Maestro de la Orden celebró la misa de Fundación de las Hermanas Dominicas de la Paz. Trescientas hermanas estaban presentes y aprobaron nuestros compromisos capitulares: “PREDICAR CON UN FUEGO NUEVO”, reclamando nuestro carisma de predicar la verdad y comprometidas a una globalización de la espiritualidad dominica”. (Entrevista de Fray Carlos Cáceres OP, Promotor de Formación y Vida Intelectual de CIDALC, a la Hna. Doris Reagan O.P)
LAS HERMANAS DOMINICAS DE LA PAZ 2009
Una nueva Congregación, un nuevo signo de unidad y misión en la Orden de Predicadores
Entrevista de Fray Carlos Cáceres OP, Promotor de Formación y Vida Intelectual de CIDALC, a la Hna. Doris Reagan O.P
– Hemos conocido sobre esta interesante "fusión" o más bien un signo de unidad en nuestra familia dominicana en esta nueva Congregación, llamada "hermanas dominicas de la paz", ¿Podrías comentarnos este proceso de vida y misión conjunta?
– En los inicios de los años 90, cuando la Hermana Margaret Ormond fue Priora de la Congregación de Sta María de las Fuentes en Columbus, Ohio, surgió un movimiento para promover una mayor colaboración entre las Congregaciones Dominicas en los EEUU. En tal sentido, se dio inicio a una Alianza Dominica y a una Federación de Congregaciones Dominicas con la meta de colaborar en cuanto a un noviciado común, días de estudio y retiros en común y mucho más… Varias Congregaciones participaron en la Alianza o en la Federación y algunos grupos participaron en las dos formas de colaboración.
En los últimos años de la década del 90, algunas Congregaciones procuraron un mayor diálogo sobre formas posibles de unirse para la misión y para la renovación de nuestra vida religiosa dominica. Los motivos fueron múltiples: un deseo de estar en misión juntas como dominicas, la oportunidad de tener una voz más visible para compartir el evangelio, el hecho de la disminución de números de religiosas en algunas congregaciones, tantas personas en liderazgo entre las varias congregaciones y no libres para ministerios etc.
Atendiendo a estas búsquedas, surgió Hermanas Dominicas Internacionales (DSI), impulsadas por Timothy Radcliffe y por el trabajo de la Hna Margaret Ormond como primera responsable para DSI, junto a los esfuerzos para renovar la Familia Dominicana en la Orden, uniendo a frailes, hermanas y el laicado dominico en la misión.
Dos Congregaciones entraron al principio en diálogo con la Congregación de Sta María de Las Fuentes sobre la posibilidad de unirse. En el curso de los años 2000 – 2003 otras Congregaciones dominicas también entraron en ese diálogo. Después del año 2003 el diálogo entró en un periodo de discernimiento dentro de cada Congregación involucrada en la propuesta y finalmente fueron 7 congregaciones interesadas: dos de Nueva Orleáns, Louisiana; una de Oxford, Michigan; una de Great Bend, Kansas; una de Louisville, Kentucky; dos de Ohio (Columbus y Akron).
El proceso fue largo y no resultó fácil. La idea siempre fue la de vivir la unión, la solidaridad, la misión y el testimonio dominico. Hubo muchas reuniones intercongregacionales para la preparación de una Constitución y otros documentos, diseños de formas creativas de la estructura administrativa, etc. Al final en los capítulos de cada Congregación, en 2008, fue aprobada la nueva Congregación.
Fue arduo el trabajo de preparación para la nueva Congregación: elegir su nombre, manera de gobernar, elecciones de una Priora y su Consejo. El visto bueno de Roma y el Capítulo de 2009 llegaron en abril, cuando el Maestro de la Orden, Carlos Azpiroz, celebró la misa de Fundación de las Hermanas Dominicas de Paz. Trescientas Hermanas Dominicas estaban presentes y aprobaron nuestros compromisos capitulares unánimemente: "PREDICAR CON UN FUEGO NUEVO", reclamando nuestro carisma de predicar la verdad y comprometidas a una globalización de la espiritualidad dominica hoy en día.
La Hna Margaret Ormond fue elegida unánimemente para ser Priora de la Nueva Congregación que llega a más de seiscientas hermanas. Hay cuatro consejeras y unas coordinadoras de misión que son responsables para la administración de la Congregación al nivel local.
– ¿Qué retos podría tener América Latina, para la nueva Congregación dominicana?
–Creo que los retos para América Latina y el Caribe son muchos: buscar formas similares de solidaridad como dominicos y dominicas en misión. El hecho de que siete distintas Congregaciones de distintas partes de los EEUU hayan dejado de ser para crear algo nuevo y haber puesto todo en común (personal, finanzas, ministerios) es un testimonio fuerte frente al individualismo de hoy. El enfoque de interdependencia dentro de la comunidad global, la promoción de la unidad en diversidad, la justicia a través de la solidaridad con los marginados y la misión de ser la Santa Predicación, son retos que hemos aceptados como mujeres dominicas que quieren dar la presencia viva del Cristo Resucitado.
-Sin duda, esta comunidad dominicana nos invita a todos y todas a contemplar en ustedes, una posibilidad concreta de vida y misión en la Orden, siendo posible la unidad en la misión conjunta en la Predicación del Evangelio a partir del discernimiento dominicano. Muchas gracias, hermana Doris, que tu misión en Honduras sea fecunda para el pueblo de Dios, que precisamente tu carisma de ser una dominica de la paz, colabore significativamente en la anhelada paz en este país de Centroamérica.
PREDICAR CON UN FUEGO NUEVO: COMPROMISOS DEL CAPÍTULO
Hermanas Dominicas de la Paz 2009
He venido a encender fuego a la tierra; ¡Cómo desearía que ya estuviera ardiendo!" Lucas 12, 49
Nosotras, Hermanas Dominicas de Paz, reclamamos nuestro carisma de predicar la verdad — con un fuego nuevo. Nuestra predicación fluye de nuestra contemplación y se encarna en nuestra oración, estudio, comunidad y ministerio. Enraizadas en la herencia de la Orden de Predicadores, damos testimonio a presencia viva del Cristo resucitado.
Como miembros de una Orden internacional y reconociendo nuestra interdependencia, nos llamamos a involucramos más en comunidad global. Abrazamos sencillez en nuestras vidas e itinerancia de mente, espíritu y cuerpo. Respondemos a las hambres de nuestro mundo compartiendo con otros/as el pan de vida.
Radicalmente abiertas a una continua conversión a la paz de Cristo, nos comprometemos a ser mujeres de paz quienes:
· Estudian, contemplan y predican la revelación divina descubierta en el misterio que se desvela en la creación y en la Sagrada Escritura.
· Crean ambientes de paz por la promoción de la no-violencia, unidad en diversidad, y reconciliación entre nosotras, la Iglesia y otros/as.
· Promuevan la justicia a través de la solidaridad con los marginalizados/as, especialmente las mujeres y los/as niños/as, y trabajan con otros/as para identificar y transformar sistemas de opresión.
· Crean comunidades hospitalarias, invitando a otras a unirse con nosotras como miembros consagradas, asociados/as, voluntarios/as, y socios/as en nuestra misión de ser la Santa Predicación.
Afirmada por el Capítulo General, 20 de abril, 2009