(Por: Hna Lorena Carribale) Del 22 al 24 de abril se llevó a cabo el Capítulo extraordinario de la Federación de Hermanas Dominicas de Argentina (FEDAR) bajo el lema “Enviadas a predicar el Evangelio”; en la casa de retiros de las Hermanas Dominicas de Santa Catalina de Siena “Chacra Santa María” en Cañuelas, Provincia de Buenos Aires.
Comenzamos nuestro Capítulo con un espacio de reflexión animado por Hna Gabriela Zengarini. Partimos de preguntas existenciales (¿Qué significa hoy la pregunta: ¿Hermana qué pides? ¿Qué significa para mi hoy como dominica la frase del Papa Francisco “tengo la intención de enviar los Misioneros de la Misericordia” – Misericordiae Vultus N18- ? ¿Qué cambio de paradigma se fueron dando en nosotras en el modo de concebir la misión?).
Además abordamos los paradigmas de Misión desde los evangelios sinópticos y desde el Evangelio de Juan. “La teología de la misión en el evangelio de S. Juan nos presenta como punto de partida del proceso evangelizador el encuentro con Jesús, “¿Dónde vives? … Venid y lo veréis… Fueron, pues, vieron donde vivía y se quedaron con él aquel día” (Jn 1, 38-39).
A partir de esta experiencia fundante estos discípulos llaman a otros compartiéndole su experiencia e invitándolos nuevamente a un encuentro con Jesús y al seguimiento (Jn 1, 35- 51). Esta misma dinámica la encontramos en el texto de la Samaritana donde Jesús nos ayuda a comprender la misión como diálogo profético.”
“Reconocer que vivimos en sociedades multiculturales exige de nosotras y nosotros una mística que posibilite el encuentro, el diálogo, el “tender puentes”… Aceptar que no puedo comprender algo del otro, forma parte de esta mística: “la aceptación de que hay cosas del otro que uno no puede comprender da al mismo tiempo permanencia e igualdad en la relación… hacer convivibles diferencias que no pueden reducirse a un denominador común”
A continuación nos abocamos a los números 52-79 de la exhortación Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium: -algunos desafíos del mundo actual (52-60), -desafíos culturales (61-67) – inculturación (68-79).
Este espacio nos preparó para discernir y elegir luego las dos prioridades que marcarán el rumbo de nuestra Federación en el próximo trienio y nuestra presencia en Argentina, teniendo en cuenta las orientaciones elegidas en la última Asamblea de CODALC en enero 2016.
PRIORIDAD I:
Ahondar y animar nuestro ser de mujeres dominicas, predicadoras de la gracia, haciendo la opción preferencial por la mujer y la niña en situación de vulnerabilidad en nuestro caminar latinoamericano.
Acciones
Recoger información desde las congregaciones acerca de la situación de vulnerabilidad de la mujer y la niña en los contextos donde estamos insertas. en vista a elaborar un diagnóstico que nos permita diseñar un proyecto común para la misión.
Sistematizar con la orientación de algún especialista estos aportes y generar acciones conjuntas; lo que también nos permitirá seguir ahondando y construyendo la espiritualidad desde nuestro ser de mujeres dominicas predicadoras de la gracia.
Brindar información sobre foros, encuentros, talleres para participar en los mismos.
PRIORIDAD II
Seguir promoviendo espacios de formación y compromisos de JPIC articuladamente con la CONFAR y otros organismos que buscan el bien y el cuidado de la casa común
Acciones
Proponer jornadas de formación sobre distintos temas relacionados con la JPIC dirigidas a hermanas de formación inicial y permanente.
Intercambiar entre las diferentes Congregaciones y comunidades material referente al tema.
Participar y promover el acompañamiento en los distintos reclamos que puedan manifestarse en defensa de los derechos de la persona.
Elegimos, además, al nuevo Equipo que animará la concreción de estas prioridades: Coordinadora: Hna. Lorena Carribale (Dominica de Santa Catalina de Siena). Vice-Coordinadora: Hna Lucina González Verón (Dominica del Santísimo Sacramento). Secretaria/tesorera: Hna Carolina Gimenez Lugo (Dominica de la Anunciata).
Al celebrar un Capítulo en el Año de la Misericordia y en el Jubileo de la Orden es un TIEMPO DE GRACIA. Que esta Gracia recibida de Dios Padre Misericordioso nos anime y sostenga en la misión recibida:
¡ENVIADAS A PREDICAR EL EVANGELIO!