Ayer al promediar las 7:30 p. m. falleció nuestra querida hermana Misionera Dominica, Reginalda Ríos, conocida por su incansable labor y llamada «la madre Reginalda». Sus manos recibieron generaciones de ciudadanos con la atención de partos a madres gestantes en el Hospital de Quillabamba (Perú).
Cómo olvidar su carisma humanitaria que siempre la caracterizó contagiando fe y esperanza a cuantos se acercaban a ella.
Su vida ejemplar sea motivo para imitarla. Descanse en paz, hermana Reginalda.