Nos escribe la hermana Marcela Soto: «El día sábado 15 de agosto, día de la Asunción de María, disfrutamos desde que nuestros nombres y rostros aparecían en la pantalla, celebrando el ir encontrándonos con hermanas y amigas, conectadas por el carisma dominicano. Con la pantalla llena de emociones nos reunimos 16 hermanas desde México, Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia, Brasil y Argentina.
Como decía Noemí, coordinadora de CODALC ante la necesidad de tener un espacio para ser cuidadas…como todas estamos cuidando y atravesando por este tiempo de desafíos muy grandes para nuestros pueblos, congregaciones, familia y para cada una de nosotras, es que nos acompañó el hno. franciscano Pablo Asqueta de Argentina.
Transcurrió la mañana entre el recuerdo vivo de don Pedro Casaldáliga, la música, el diálogo y algunas técnicas, miramos esta pandemia que nos ha afectado a tod@s, como una tormenta pero no del mismo modo, brotan preguntas ¿cómo estoy viviendo?, ¿qué quiero con la vida?…la pandemia es el retorno a la tierra, se habla “normalidad” pero el mundo no va a ser el mismo porque tiene sus consecuencia y también nos ofrece oportunidades…son algunas pinceladas o trocitos de momentos sagrados vividos este día como regalo de Dios».